Vergil es un maestro del arte del Iaijutsu. Sus técnicas están pulidas a la perfección. Pocos enemigos son capaces de escapar a la precisión de su afilada hoja. Al eliminar acciones innecesarias, tales como correr sin sentido o fallar estocadas, Vergil ganará concentración, lo que le convertirá en una amenaza aun más letal. Para cada acción, una reacción. Cualquiera puede blandir una espada, pero solo los más disciplinados pueden dominar su arte.

Una poderosa espada capaz de separar hombre y demonio. Es la fuente del poder de Vergil, además de ser un recuerdo de su padre, el caballero oscuro legendario Sparda. Su forma, basada en las katanas japonesas, es perfecta para el Iaijutsu, y su afilada hoja puede cortar el espacio inter-dimensional.

Beowulf, un poderoso demonio, pensó en conspirar una vez contra Sparda para saciar su odio hacia el caballero oscuro atacando a su hijo. Sin embargo, su derrota fue fulminante. Tal fue su destino que lo único que quedó de él fueron estos guanteletes y estas botas.

Imbuidos con el poder de la luz, muestran su valía en el combate cuerpo a cuerpo, donde un solo ataque cargado de furia puede desencadenar un poder devastador.

Un arma que toma forma a partir de la energía infernal de Vergil. Hay algo en esta espada, en su forma, en sus ataques, que la hacen similar a Force Edge, la espada que el padre de Vergil blandió hace mucho tiempo.

Rápida y furiosa, sus fugaces ataques no tardarán en sobrepasar al enemigo.

Vergil nunca fue muy fan de las armas de fuego. Su estilo se basa en estos proyectiles de energía demoníaca. Aunque son muy efectivos a larga distancia, también son capaces de inutilizar al enemigo y además son de gran utilidad a la hora de encadenar diversos combos. Las pobres almas que se vean atrapadas en una tormenta de espadas como esta no conocerán la piedad, sino la muerte.

Una sombra nacida de la energía infernal y esculpida por Yamato. El doppelganger imita los movimientos y ataques de Vergil, además de su apariencia demoníaca. El hecho de que tanto el maestro como su sombra puedan moverse con tal armonía demuestra el dominio que Vergil tiene de esta técnica.

Vergil absorbe el poder de Yamato, lo que le permite desatar su verdadera naturaleza demoníaca. En este estado, saca fuerzas de sus lados humano y demoníaco para aumentar sus ataques. Con suficiente concentración, también podrá acceder a técnicas extremadamente poderosas que tornarán el rumbo del combate a su favor.

Cuando lo necesite, Vergil podrá clavar Yamato en su propio cuerpo, liberando así la esencia de V. En ese momento, V controlará a sus lacayos para desatar un inmenso poder sobre el campo de batalla.

Aunque V represente el lado humano del alma de Vergil, éste no tendrá problema alguno en invocarlo a placer. Domina a Yamato y tu también serás capaz de invocar tal poder.